“Afortunadamente se logró apagar el fuego”
Así se expresó el aeroaplicador Pablo Pilot, quien formó parte, junto a otros cuatro pilotos, de controlar el incendio que había en el Cerro San Javier en Tucumán. Fueron convocados por el gobierno y, junto a bomberos, brigadas terrestres, apoyo en tierra para la recarga de agua, trabajaron volando cinco aviones agrícolas durante dos días ininterrumpidos para lograr, finalmente, sofocar las llamas.
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